miércoles, marzo 10, 2010

En la selva tropical había un gigante (bis)

A todos aquellos que entran en mi blog siguiendo el resultado de búsquedas curiosas como "en la selva tropical había un gigante" (tengo el dudoso honor de ser el primer resultado de google al buscar esa frase), y que os encontráis con que la canción no está entera, aquí os dejo un par de versiones que he podido encontrar por internet, para que no tengáis que seguir buscando.

VERSIÓN 1
En la selva tropical había un gigante
oe, oe oe oeeee
que quería dar por culo a un elefante
oe, oe oe oeeee
el elefante que no era del oficio
oe, oe oe oeeee
con la tropa se tapa el orificio
oe, oe oe oeeee (sigue así todo el rato)
Los leones, que no eran maricones,
con espigas se rascaban los cojones.
Las hormigas, que no eran gilipollas,
se pegaban pellizquitos en la polla.
El capitán de las Islas Baleares
con la polla hacía juegos malabares.


VERSIÓN 2
En la selva tropical había un gigante
que quería dar por el culo a un elefante
y el elefante que no era del oficio
con la trompa se tapaba el orificio
Los leones, que eran maricones,
con el rabo se tapaban los cojones
los monos que estaban mirando
todo el rato se la estaban meneando
y las hormigas que salían de la olla
se iban dando pellizquitos en la polla


Ninguna de las dos versiones corresponde exactamente con mis recuerdos de la infancia, pero por si a alguien le valen, ahí las dejo.

PD: Jejj, mi primer post de 2010, veremos si es el único:D

19 comentarios:

David Vizcaya dijo...

hooooooolaaaaaaaaaaaaaaa

Sybelle dijo...

yo conozco otra versión que dice:

En el mar de la china había un gigante que le quiso dar por culo a un elefante y el elefante como no era del oficio, con la trompa se tapaba el orificio. y los indios que lo estaban vigilando, con las dos manos se la estaban meneando :)

Anónimo dijo...

Por que no:)

Anónimo dijo...

Yo la recuerdo así:

En la selva vivía un gigante
que quería dar por culo a un elefante
el elefante que no era del oficio
con la trompa se tapaba el orificio
y los monos que lo estaban divisando
con la zurda se la estaban meneando
las hormigas que no eran gilipollas
le pegaban pellizquitos en la punta de la polla

Anónimo dijo...

Yo la recuerdo:
EN la selva tropical habia un gigante,
que queria dar por culo a un elefante,
como no tenia dinero pal cigarro,
se fumaba los pelos del sobaco,
como no tenia dinero pa la droga,
se fumaba los pelos de la polla...!

Anónimo dijo...

A mi me suena mas
El elefante como era medio vizco...

Mikail Town dijo...

Jajajaja, diste en el clavo, buscando en Google encabezas la lista, jajaja, buen sentido del humor.

Salud.

Anónimo dijo...

Yo cantaba:
En la selva tropical había un gigante
Que quería dar por culo a un elefante
El elefante como era medio bizco
Se tapaba con la trompa el orificio
Los leones como eran maricones
Se rascaban con las uñas los cojones
Las hormigan como eran gilipollas
Se daban mordisquitos en la polla

Más o menos es igual que todas

Anónimo dijo...

En las islas Baleares había un gigante
Que le quería dar por culo a un elefante
Él elefante que no era del oficio
Con la trompa se tapaba el orificio
Las hormigas que eran gilipollas
Se daban mordisquitos en la polla
Los leones que eran maricones
Con las uñas se rascaban los cojones
Capitán de las islas Baleares
Que con la polla hacia juegos malabares
Capitán de las islas Filipinas
Que con la polla abría latas de sardina
Capitán de las islas portuguesas
Que con la polla abría latas de cerveza.

TWM dijo...

Y la hija del sultán cuando se baña
lo primero que se seca es la castaña

TWM dijo...

Y la hija del sultán cuando se baña
lo primero que se seca es la castaña

Victor Zambra dijo...

"el elefante que era ducho en el oficio
con la trompa se tapaba el orificio"

Anónimo dijo...

Y el elefante como era un puñetero
Con la tropa se tapaba el agujero

Fer dijo...

En la selva de un gigante que querían dar por culo a un elefante el elefante que no era del oficio con la trompa se tapaba el orificio
Los leones que eran poco maricones con las zarpas se rascaban los cojones
Y los monos que lo estaban divisando con la zurda se la estaban meneando
Las hormiguitas que eran poco mariquitas al gigante se la raspaban con las patitas
El Marqués y la marquesa duermen juntos porque dicen que tienen miedo a los difuntos
El capitán de las Islas Baleares con la polla hace juegos malabares
Y la hija del sultán cuando se baña lo primero que se seca es la castaña

Josemiguelboy dijo...

De donde soy yo era asi:
Os voy a contar la historia de un gigante que quería dar por culo a un elefante y como el elefante no era muy diestro en el oficio, con la trompa se tapaba el orificio y unos monos que estaban espiando con las ramas se la estavan meneando, y unos leones que eran maricones a Julio césar le lamian los cojones,el sultán tiene una caja de caova, donde mete a sus mujeres y se la soba

Anónimo dijo...

Allá en el África Oriental había un gigante (tots trempats, tots trempats, coro) que quería dar por culo a un elefante (tots trempats..) El elefante, que no era del oficio, con la trompa se tapaba el orificio (tots trempats...) por lo cual, se deduce y se difiere que a quién le dan por culo es porque quiere! (tots trempats, tots trempats

Anónimo dijo...

Allá en el África oriental había un negrote (tots trempats, tots trempats) que se quejaba de tener un buen cipote (tots trempats...) Allá en el África oriental había un negrito que se quejaba de tener muy corto el pito (tots trempats..) Por lo tanto en este mundo de desdicha, nadie está contento con su picha (tots trempats)

Anónimo dijo...

A la orilla del rio hay un negrito
Que se queja de tenerlo muy chiquito
A la otra orilla del rio hay un negrote
Que se queja de te tenerlo muy grandote
Este mundo tiene la gran desdicha
De que nadie se conforma con su picha.

Anónimo dijo...

Canciones

Su vida era un portal. Dos pechos enormes. Ojeras, de tan hondas, donde se podía meter el dedo. Muslos que al andar se estorbaban. Pequeños zapatitos, muy graciosos, de charol malo. Y siempre, a cualquier hora del día, aquella cantinela nauseabunda: "Los cojones del cura/ de Almendralejo/ le pesan veinte arrobas/ sin el pellejo./ Los cojones del cura/ de Argamasilla/ que al andar le sonaban/ a calderilla./ Los cojones del cura/ de San Segundo/ que no los hay iguales/ en todo el mundo».
Encendía puros baratos (Farias) los embadurnaba del carmín de sus labios gruesos, cogía aire y procuraba no perder fuelle: «Los cojones del cura/ de Tarancón/ que abulta cada uno/ como un melón./ Los cojones del cura/ de Valdemoro/ que los cuida su dueño/ como un tesoro./ Los cojones del cura/ de Villalpando/ los llevan cuatro bueyes/ y van sudando./ Al cura de Villarejo/ de Salvanés/ le llegan los cojones/ hasta los pies./ El cura de Durango/ algunas veces/ con el chinguilindango/ casca las nueces".

Mientras bebía no cantaba. Aprovechaba la pausa. La faena, sí, la hacía por señas, acordaba los precios con los dedos de una mano y subía para el altillo con el señor cogido de la mano como un párvulo. Tras el trago (vino, en su mayoría, siempre muy frío, a veces con grandes pedruscos de hielo) seguía a lo suyo: "El cipote del cura/ de Manjarrés/ lleva ya desvirgadas/ lo menos tres./ El cipote del cura/ de San Torcuato/ lleva ya desvirgadas/ a más de cuatro./ El cipote del cura/ de Navarrete/ lleva ya desvirgadas/ lo menos siete./ El cura de Bayona/ duerme en el suelo/ porque ha roto la cama/ con el ciruelo./ ¿Para qué quiere el cura/ lo que le cuelga?/ que se lo eche a los gatos/ que se entretengan".

Cáritas o alguna organización religiosa dijo que aquello no podía ser, y más en el centro de Madrid, por lo que le pusieron a la susodicha, tan anónima y salvaje, un educador social. El resultado no sé si mejoró. No tardó en cantar, esta vez con melodía de polka, nuevos y extraños temas: "La infanta Doña Eulalia/ se rascaba el chipichí con una dalia./ La infanta Doña Isabel/ se rascaba el chipichí con un clavel./ Moraleja:/ Habrá que amonestar a las infantas/ por el mal uso que hacen de las plantas./ Está muy bien, está muy bien, está muy bien,/ de esa opinión participo yo también./ Haz bien y no mires a quién, cabrón".

Parece que la cosa cambiaba pero enseguida comenzaba otra: "En la India Occidental había un gigante/ que quería dar por culo a un elefante/ y el elefante que no era del oficio/ con la trompa se tapaba el orificio./ Moraleja:/ Si por el culo la quieres meter/ escoge previamente al ‘partener’./ Está muy bien, está muy bien, está muy bien,/ de esa opinión participo yo también./ Haz mal y no mires a cual, cabrón".

Esta me gustaba a mi especialmente, por lo ‘vintage’: "La portera de casa Marquina/ se lava con jabón y agua de quina/ en cambio la portera de mi casa/ se lava con clorato de potasa./ Moraleja:/ Son muchas las maneras/ que tienen de lavarse las porteras./ Está muy bien…".

Esta otra levantaba sarpullidos entre la concurrencia: "El obispo de las Islas Baleares/ con la polla hace juegos malabares/ El obispo de las Islas Filipinas/ con la polla abre latas de sardinas./ Moraleja:/ De lo dicho se deduce con esmero/ la mucha fuerza que en la polla tiene el clero./ Está muy bien…".

Esta era agraz y desinteresada: "Hubo un papa muy pillín y muy ufano/ que de putas llenó el Vaticano/ por no tomar las debidas precauciones/ ha cogido unas tremendas purgaciones./ Moraleja:/ Aunque el papa es infalible con la boca/ a veces con el pito se equivoca./ Está muy bien…".

Aquella otra era de ritmos nativos: "En el África oriental había un negrito/ que se quejaba de tener muy corto el pito/ En la occidental un hotentote/ que se quejaba de tener largo el cipote./ Moraleja:/ En este mundo de penas y desdichas/ nadie está contento con su picha./ Está muy bien…".

Murió de frío. Sus últimas palabras: "Si te quieres tirar a la que amas/ no te andes nunca por las ramas".